Pecios

             

   

            Siguiendo en el ámbito de la literatura, para conceptualizar las obras también me ha resultado de ayuda conocer los “pecios” de Rafael Sánchez Ferlosio. Normalmente esta palabra hace referencia a restos de construcciones humanas hundidas total o parcialmente en el agua, sin embargo el escritor la utiliza para denominar una serie de relatos cortos que no tienen ni comienzo ni final dado. Por tanto es el lector el que tiene (o no) que llenar los huecos.

            De nuevo, como sucedía con la palabra apnea, ambas descripciones del término me han sido útiles: para mantener la coherencia con el elemento sobre el que he trabajado y para crear esculturas que son buscan ser restos arquitectónicos de espacios inexistentes y subjetivos. Elementos de un espacio en suspensión.

           El hecho de que los pecios puedan incluir ruinas, también implica la posibilidad de integrar en ellos componentes de “ruptura” a través de diferentes estratos con la material. Pensando también, que si el interior del volumen escultórico fuese de un material que no se emplee normalmente para estructuras (o que fuese blando), podría ser una manera de expresar matericamente lo surreal vinculado a lo terrenal tal y como Haruki Murakami hace en sus novelas.